Notas agronómicas con énfasis en plagas y enfermedades en el cultivo de la gerbera

Por: Daniel Duran L.
Ing. Agrónomo U. Nal., Bogotá

Ha aparecido una nueva plaga en la Sabana de Bogotá: una cochinilla harinosa recubierta de una especie de cera de color blanco, y de color café claro su cuerpo, muy agresiva. Partiendo de la corona de la planta de gerbera asciende por todo el tallo floral; también se localiza en el envés de algunas hojas (hemíptero). Puede volver las flores no exportables y no se registra como plaga en las plantas de gerbera en la floricultura colombiana.
Se han encontrado áfidos, Myzus sp., atacando el sistema radicular de las gerberas, algo muy poco frecuente en estas plantas, y formando colonias numerosas, en su modo de atacar las plantas.
Se ofrece para la floricultura colombiana un humus de lombricultura de excelente calidad, enriquecido con microorganismos benéficos, que se puede aplicar también en diferentes cultivos ornamentales e intensivos. Además, producen humus líquido para aplicar por vía foliar o en forma de drench. Se produce en una localidad especialmente construida para tal labor en la vía Zipaquirá – Nemocón.

El humus sólido se puede mezclar hasta un 20% del volumen de un suelo o sustrato. Se tienen análisis físicos y químicos, análisis de metales pesados, donde se detalla el contenido de los diferentes minerales que poseen tanto el humus sólido como el líquido. El Humus plus está enriquecido con 20 aminoácidos más el ácido fólico, cepas de EM, 20 en total. Tiene ácidos húmicos y fúlvicos, ácido giberélico y auxinas.

Recordar que la rizósfera está asociada con plantas, suelo, y microorganismos, donde el humus de lombricultura desempeña una función benéfica definitiva.

La nutrición de la planta se logra con un sinergismo bioquímico complejo en la rizósfera, donde el humus de lombricultura cumple un papel básico en los elementos minerales y el complejo de microorganismos naturales del suelo (Horti Organic).
Los primeros problemas fitosanitarios que se deben enfrentar en las gerberas cuando se reciben las plántulas son la Botrytis y los Fungus gnats, de los géneros Sciara y Bradysia, conocidos también como mosquitas de los hongos, mosquitas de los champiñones y mosquitas de las alas negras que, en estado larval, se alimentan de raíces y tallos.
Las enfermedades foliares son más frecuentes en las gerberas, de lo que se supone. La Alternaria puede afectar la mayor parte del limbo foliar. Botrytis puede invadir las hojas y corona de la planta y ataca también las flores.

Cercospora sp., Cladosporium sp., Ascochyta sp. y Spodoptera sp. suelen producir problemas en el sistema aéreo de las plantas. Para el control del mildeo polvoso, oídium causado por Sphaeroteca pannosa, no es indispensable usar sublimadores de S, que son muy nocivos para el medio ambiente. Se consiguen funcigidas químicos y biológicos que son efectivos en el control de esta enfermedad.
Enfermedades causadas por virus como el TSWV se trasmite por trips; el DAMV, el virus del mosaico de las dhalias, se transmite por áfidos.
Enfermedades bacterianas, como la causada por Pseudomonas sp produce manchas circulares con bordes café oscuro; puede llegar a atacar hasta el centro de la corona de la planta. Presencia alta de minadores agudiza el problema. Pseudomonas sp. también produce puntos que forman heridas que crecen alrededor de las venas. Para el control de esta enfermedad Empresa Semillas del Valle y Empresa Biocultivos S.A., tienen cada una un producto biológico que colabora en el manejo de esta bacteria.
Las plantas de gerbera en las condiciones de la Sabana de Bogotá es mejor llevarlas de siembra hasta su recambio 3 años, con las características propias de un cultivo joven (menor número de enfermedades, mayor productividad y mejor calidad, menor presencia de ácaros, menos mano de obra en su mantenimiento, etc.).
Actualmente se ofrecen plantas que tienen la característica genética de “descolgar” más rápido las hojas más adultas, pero fotosintéticamente activas, lo que permite a los rayos solares activar más rápidamente, y en mayor número, los botones florales. Consulte con su representante comercial las variedades que tienen este comportamiento.
Se han encontrado plantas de año y medio y 2 años con 45-60 hojas en buen estado y con una producción de 0.7-0.8 flores – planta-semana.
Plantas con las lígulas hendidas en su parte apical se deben evitar ya que sus bordes se suelen ennegrecer con los consiguientes problemas que esto acarrea.
La “negrilla” que se desarrolla en las hojas, mayormente en el envés causada por insectos como los áfidos y la mosca blanca, indica que no hay un buen control de estos insectos y el peligro que se tiene por ser vectores de virus.
Hay hongos que atacan el limbo foliar de las gerberas, y en ocasiones sus pecíolos, como son Alternaria, Ascochyta, Cercospora y Botrytis. Alternaria a veces es la más agresiva en la Sabana de Bogotá junto con la Botrytis, En lo posible, se deben controlar tan pronto como se detecten.
A las plantas más jóvenes las atacan Pythium y Rhizoctonia. Al “cuello de la planta”, Phytophthora criptogea, que es la enfermedad que más muertes causa entre las que atacan a las gerberas.
También ocurren afectaciones por Sclerotinia sclerotiorum en ambientes muy húmedos y con escasa ventilación.
Enfermedades vasculares causadas por Verticillium alboatrum var dhalia pueden ocurrir igual que por Fusarium oxysporum.
Meloidogyne sp., se presenta afectando el sistema radicular de las plantas, causando daños considerables (enanismo, hojas decolaradas, flores no comerciales, etc.).
Los sinfílidos, Scutigerella inmaculata, atacan muchas especies de plantas, como rosas, crisantemos, con daños que pueden causar la muerte de las plantas sino se controlan a tiempo. Meloidogyne y los sinfílidos los controla bien el extracto del árbol de Neem, comercialmente vendido en Colombia como Neemazal.

El control es efectivo siempre y cuando se ataquen estas plagas desde los primeros síntomas y con poblaciones bajas. Se debe aplicar dicho producto con cierta regularidad, como 4-5-6 semanas, según el número de plantas afectadas.
Enfermedades causadas por el virus TSWV, siendo su principal vector el trips Frankiniella occidentalis; aplicaciones de L`ecomix más Cazador o L`ecomix más Rescate ayudan a mantener poblaciones muy bajas de estos insectos. Caminos entre las camas muy secos y encalados con Ca (OH)2 más o menos unos 2 kilos por camino cada 3 – 4 meses pueden ayudar, ya que las larvas caen desde las hojas hacia el suelo para completar su ciclo. Los extractos bien concentrados de Ajo-Ají más un insecticida químico también colaboran en el control de los trips.
Itersonilia perplexans causa problemas gravísimos en las lígulas de los capítulos, y éstos se tornan inexportables. Una rotación de productos contra Botrytis y Sphaeroteca baja la incidencia de esta enfermedad.
La pudrición causada por Rhizopus sp ataca hojas y flores formando manchas difusas de color negro, en las hojas y en las flores las lígulas se tornan de color café.
Deficiencias de Fe producen en las hojas clorosis intervenal y si es muy fuerte, enanismo de éstas. Una fertilización con 5 ppm de Fe aplicada regularmente en la solución fertilizante soluciona este problema.
Activadores biológicos como Biochbac, Terra vitae, Emagro, EM, Valagro, etc., se suelen aplicar los domingos en que los riegos van sin fertilización, en el caso de Jacaranda.
Se advierte que el autor de estas notas no tiene ningún vínculo comercial ni de ninguna otra clase con los productos de las casas fabricantes o vendedoras de los insumos aquí citados.
Algunas de las notas escritas son producto de una experiencia de 38 años en el cultivo de la gerbera en Piendamó, Cauca, en el Oriente Antioqueño y en la Sabana de Bogotá, en colaboración con los obtentores de las variedades de gerbera de Dümmen Orange, Florist, Schreurs, Selecta y de ingenieros agrónomos colombianos en varias fincas de estas zonas.