Por: I.A. John Alejandro Rojas Alfonso
Coordinador de Mercadeo Avgust Colombia.

 

Dentro de los sistemas agrícolas que actualmente que desarrollamos es muy común encontrar y convivir con plantas que no son el objetivo de producción y que por el contrario, en todos los casos compiten con el cultivo por agua, luz, espacio y nutrientes, si estos suministros no llegan en las cantidades adecuadas al cultivo, la respuesta más probable es una disminución del potencial de producción de nuestro cultivo o el detrimento de la calidad de los productos que completen el ciclo, otro factor a tener en cuenta es la capacidad de estas plantas de convertirse fácilmente en hospederos de plagas y enfermedades.

El manejo de estas especies con las que compartimos terrenos se debe hacer con base a un adecuado diagnóstico y al involucramiento de diferentes medidas de control dentro de las cuales se incluyen:

Controles legales. Son todas las disposiciones legales emitidas por parte de las autoridades para prevenir la entrada o diseminación de las especies no deseadas.

Controles físicos. Dentro de los controles físicos se pueden enumerar las barreras físicas que no permiten la emergencia y competencia de las malezas con el cultivo (Instalación de plásticos sobre la superficie del suelo, aislamiento de los sustratos del banco de semillas del suelo, etc.) también se incluye dentro de este tipo de controles el uso del calor como fuego o vapor y del frio para controlar semillas dentro del sustrato.

Controles mecánicos. Este tipo de controles hace el uso de herramientas que buscan destruir la parte aérea de las plantas e incluso partes subterráneas de las mismas, se incluyen tractores con sus implementos, azadones, guadañas, machetes, etc. No se recomienda el uso de estas herramientas cuando contamos con especies de reproducción asexual ya que se puede diseminar aún más el problema.

Controles culturales. Son todas las medidas anexas al cultivo que buscan dar a este las mejores condiciones de competencia a las especies arvenses, se incluyen la rotación de cultivos, la preparación de suelos, el uso de variedades de alto vigor, el uso de mulch o de sustratos inertes que no permiten la entrada de luz al banco de semillas de las especies no deseadas.

Controles biológicos. Es la utilización de agentes vivos para el manejo de las poblaciones de especies no deseadas.

Controles químicos. La utilización de agentes químicos para prevenir la emergencia de semillas de las especies no deseadas, así como el ataque a la fisiología de las plantas ya establecidas forman parte de este tipo de control, una clasificación completa de los herbicidas químicos por su mecanismo de acción y grupo químico puede ser consultada en www.hracglobal.com

La cada vez más difícil consecución de mano de obra hace que las herramientas químicas sean las más apropiadas para el manejo, rápido y seguro, a continuación se presenta un cuadro resumen de las diferentes alternativas químicas incluidas dentro del portafolio de Avgust Colombia (Tabla 1):

 

El asesoramiento para el manejo de los herbicidas hace parte de los servicios ofrecidos por Avgust Colombia a través de nuestro equipo local.

El éxito en el manejo de las poblaciones de especies arvenses dentro del cultivo depende de factores importantes que no se pueden desatender:

(I) Adecuado diagnóstico del tipo de planta a combatir. (II) Planeación de los tipos de manejo a involucrar dentro de un programa. (III) Determinación del estado de desarrollo y de susceptibilidad de las mismas (mejor prevenir que curar). (IV) Elección adecuada del tipo de herbicidas a utilizar. (V) Momento y técnica para lograr la interacción del herbicida con las plantas a tratar, manteniendo la selectividad al cultivo protegido.