Por: Luz Angela Giraldo Murillo
Psicóloga – Especialista en Gerencia de Recursos Humanos
Directora de Evaluación y Selección AGROHUNTERS

El síndrome de Burnout (quemado, fundido, agotado, por su traducción del inglés) fue descrito en 1974 por el psiquiatra Herbert Freudenberger y es definido como un proceso paulatino, por el cual las personas pierden interés en su trabajo y pueden hasta llegar a profundas depresiones. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha adoptado el concepto de Síndrome de Burnout para ser tenido en cuenta en el sistema de salud de cada país. En Colombia se han realizado estudios al respecto en áreas específicas como la salud, docencia, fuerzas militares, entre otras.

Invertimos casi un tercio de nuestra vida en el lugar de trabajo, donde se desarrollan gran parte de las relaciones interpersonales y las situaciones de tensión. 

El estrés laboral asociado a estas relaciones conlleva consecuencias para la salud física y mental de las personas. El estrés laboral y el síndrome del profesional quemado (Burnout), son las principales consecuencias derivadas de las situaciones de constante tensión en el trabajo.

El síndrome de Burnout consiste en una respuesta psicológica al estrés laboral que se ha tornado crónico y que compromete tres dimensiones:

  1. Agotamiento Emocional: (disminución de energía, sentimiento de desgaste emocional y físico, asociados a una sensación de frustración y fracaso).
  2. Despersonalización: (Sensación de estar flotando en el aire encima de sí mismo, de que no eres tú y no tienes control del habla o de los movimientos).
  3. Pérdida de deseos de logro o de realización personal. 

Síntomas más comunes del Síndrome de Burnout

El Burnout se genera mediante un proceso que evoluciona lentamente y puede ser desconocido para quien lo padece. Los síntomas de dividen en emocionales, actitudinales, conductuales (comportamiento) y físicos. Estos son algunos de ellos:

  • Síntomas emocionales: ansiedad, sentimientos de soledad, impotencia.
  • Síntomas actitudinales: hostilidad, suspicacia, cinismo, apatía, tendencia a no verbalizar.
  • Síntomas conductuales (comportamiento):  agresividad, cambios repentinos de humor, aislamiento, frecuente enojo, irritabilidad.
  • Síntomas físicos (pueden presentarse o incrementarse en quien ya los padece):  palpitaciones, hipertensión, dolor de pecho, asma, catarros frecuentes, infecciones frecuentes, alergias, dolor de espalda, fatiga crónica, insomnio, jaquecas. 

Las alteraciones físicas son las generalmente percibidas por las personas y las que causan un mayor impacto sobre su calidad de vida. Los síntomas actitudinales, emocionales y de comportamiento son los que más afectan las relaciones interpersonales y son percibidos por las personas del entorno.

Los síntomas mencionados no sólo producen consecuencias en el plano físico y emocional de la persona afectada, sino que también tienen repercusiones directas sobre la organización para la cual trabaja. De hecho, uno de los indicadores es la baja satisfacción laboral, que se traduce en un deterioro de la calidad de servicio que el trabajador ofrece.

Test para identificar el Síndrome de Burnout

Si usted considera que, más allá del estrés o insatisfacción laboral, está en peligro de padecer Burnout, hágase las siguientes preguntas que lo llevarán a identificar si padece de este mal:

  • ¿Se ha vuelto cínico o crítico en el trabajo?
  • ¿Se arrastra para ir a trabajar y suele tener problemas para empezar una vez ha llegado?
  • ¿Se ha vuelto irritable o impaciente con los compañeros de trabajo o clientes?
  • ¿Le falta la energía para ser consistentemente productivo?
  • ¿Se siente insatisfecho con sus logros?
  • ¿Se siente desilusionado con su trabajo?
  • ¿Está consumiendo excesiva comida, drogas o el alcohol para sentirse mejor?
  • ¿Sus hábitos de sueño o apetito han cambiado por culpa de su trabajo?
  • ¿Está preocupado por los dolores de cabeza inexplicables, dolores de espalda u otros problemas físicos?

Si usted ha experimentado varios de los síntomas mencionados por un periodo de tiempo mayor a tres meses y ha dicho SI a tres de las preguntas mencionadas, es hora de implementar acciones para salir del Burnout. 

Invertimos casi un tercio de nuestra vida en el lugar de trabajo, donde se desarrollan gran parte de las relaciones interpersonales y las situaciones de tensión.

¿Cómo salir del Burnout? 

  1. Cuide su salud. En ocasiones no priorizamos la salud hasta que experimentamos un síntoma muy fuerte.
  2. A través de los conductos oficiales establecidos en su trabajo, presente la situación que esta viviendo, de manera respetuosa y objetiva.
  3. Establezca prioridades laborales y personales y si ello lo lleva a tomar decisiones, hágalo, priorizando su calidad de vida. 
  4. Recupere la inspiración. Realice actividades que lo apasionen, tanto en el ámbito laboral como en el personal.
  5. Mejore la comunicación con las personas de su entorno personal y laboral.
  6. Rodéese de personas que le aporten consejos positivos y honestos.  
  7. Fije horarios para desconectarse de sus responsabilidades laborales y concentre su esfuerzo y atención cuando realice su trabajo. 
  8. Aprende a decir “NO”. Un buen trabajador sabe poner límites de manera asertiva.
  9. Aprenda a afrontar el estrés mediante técnicas de relajación y respiración.
  10. Es necesario ajustar las expectativas a la realidad. ¿Son reales sus metas o está pensando con el deseo?
  11. Implemente hábitos saludables: Cuide su alimentación, abandone el tabaco, el alcohol y otras drogas, práctique ejercicio físico.
  12. Si le es posible, tome vacaciones o destine un tiempo para hacer una pausa en su vida laboral, que le permita analizar, revisar y valorar objetivamente su situación personal. 
  13. Si la situación no mejora, busque ayuda profesional sin demora.

¡Un día tu vida pasará ante tus ojos! Asegúrate que merezca la pena mirarla.