Cultivo de hortencias rosadas y blancas en invernadero

Por: Liceth Ayala Samacá

Gerente MKT LATAM

STK

José Estévez

Gerente Colombia

STK

Hoy, la ciencia, la creatividad y el conocimiento reemplazaron la tierra, como fuente de riqueza. La tierra puede ser conquistada, la ciencia no. La ciencia es universal, sin fronteras. Los ejércitos no pueden conquistarla”

Shimon Peres

STK bio ag Technologies es una empresa israelí fundada en 1994. En 2008 STK enfoca su estrategia en el desarrollo de soluciones sostenibles para el manejo fitosanitario de los cultivos; es así como orienta sus recursos  a la investigación del extracto de aceite del árbol del té (TTO por sus siglas en inglés), Melaleuca alternifolia, al cual se le atribuyen múltiples beneficios en usos tópicos, antibacterianos y antifúngicos, entre otros, y el cual es la base del producto  Timorex Gold, primer extracto botánico registrado como Biofungicida y Bactericida en Colombia. Hoy se comercializa en más de 30 países y 100 cultivos alrededor del mundo. STK inició sus operaciones en Colombia en el año 2013, contando hoy con una etiqueta que incluye más de 35 cultivos y 22 enfermedades asociadas a diferentes hongos y bacterias.

Desde su origen en el país, Jose Estevez ha liderado el desarrollo, expansión e innovación de Timorex Gold y STK Regev, el primer híbrido del mercado que combina TTO con una molécula de síntesis química “el puente entre la agricultura convencional y la producción de alimentos sostenible”. Su compromiso con la sostenibilidad, la dedicación y perseverancia hacen que hoy Timorex Gold y STK Regev sean marcas líderes referentes en el mercado de bioinsumos en Colombia, productos de innovación, respaldo y contundencia.

Uno de los aspectos fundamentales que ocupa a STK es garantizar al usuario una formulación de calidad, homogénea en los diferentes lotes de producción.

La formulación es el proceso mediante el cual diferentes sustancias se combinan en proporciones precisas para crear un producto específico. La homogeneidad de dicho producto va a depender de la calidad de las materias primas y la estandarización de los procesos desarrollados por cada compañía.

Lo que hay detrás de cada botella naranja de STK es una poderosa formulación base botánica, resultado de procesos estandarizados y certificados en cada una de las fases del proceso:

Desde la trazabilidad de la materia prima, como el caso de los cultivos de árbol de té, producidos bajo condiciones agronómicas especiales con las que se garantizan materias primas certificadas en pureza e inocuidad. Sigue un proceso de extracción que cumple con los más altos estándares de calidad y plantas de producción y empaque con certificación orgánica. Por último, se hace un estudio minucioso del producto que incluye un proceso de análisis a la composición de cada uno de los lotes, identificando y cuantificando los componentes activos e inertes.

Todo esto resulta en una solución de calidad superior, estable y homogénea que beneficia al agricultor en la preparación, dilución y aplicación sobre sus cultivos de manera efectiva y segura para todos, traduciéndose en contundencia en el control de hongos y bacterias, con menor impacto ambiental y mayor valor nutricional.