Por: Camilo Echeverri Erk, I.A.
En la pasada edición de esta revista celebramos el ingreso de la uchuva colombiana al mercado de los Estados Unidos, sin tratamiento cuarentenario de frío. Hoy estamos registrando un nuevo logro del país con el despacho del primer contenedor de pimentón a los Estados Unidos el pasado 22 de septiembre. El producto exportado (11 toneladas) proviene de la empresa ‘Pimentonera Santa María’ ubicada en El Dovio, municipio situado al norte del Valle del Cauca, y fue despachado por la Empresa Clasificadora de Frutas del Valle – Clasifruit – de la Unión, población localizada en la misma región. Esta empresa está trabajando con otros pequeños y medianos productores y asociaciones de productores, con los cuales espera acopiar y procesar el producto para despachar semanalmente un contenedor (diario El Tiempo).
El pimentón (Capsicum annuum) es conocido en otros países como pimiento morrón, pimiento dulce, chile morrón, ají morrón o ají dulce. Pertenece a la familia de las solanáceas y es la especie más extendida y cultivada del género Capsicum.
Estamos registrando un nuevo logro del país con el despacho del primer contenedor de pimentón a los Estados Unidos
En el 2021 Estados Unidos importó cerca de US$1.943 millones en este rubro, siendo sus principales proveedores México, Canadá, República Dominicana, Honduras, Guatemala, Países Bajos, Israel, El Salvador y España (Ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia – MINCYT). Al igual que ocurrió con otros productos hortofrutícolas colombianos que han ingresado recientemente a este interesante mercado, como aguacate Hass, arándano y uchuva, el inicio del largo camino del pimentón se remonta a los primeros años de este siglo, cuando el producto fue incluido en la lista de cultivos con potencial exportador, para los cuales el Centro de Excelencia Fitosanitaria – CEF – inició los primeros estudios de análisis de riesgo de plagas. Como lo he mencionado en anteriores artículos, el CEF fue una iniciativa del Dr. John Shaw, quien para la época representaba al Servicio de Inspección de Sanidad Agropecuaria del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA-APHIS). En conjunto con el Instituto Colombiano Agropecuario – ICA, su contraparte, y el Instituto Interamericano para la Cooperación para la Agricultura (IICA), como operador de los recursos donados por el gobierno de los Estados Unidos, la oficina de USDA-APHIS en Colombia puso en funcionamiento un centro para la elaboración de estudios de análisis de riesgo y mitigación de plagas, los cuales, con la aprobación por parte de las oficinas centrales del APHIS, condujeron finalmente a la obtención del permiso de ingreso a los Estados Unidos de los productos arriba mencionados. El ingreso de cada uno de estos productos constituye un motivo de gran orgullo para los que fuimos parte del CEF.
Después de 18 meses de haber obtenido el aval del APHIS, y tras un juicioso trabajo realizado por el ICA con el productor y el exportador para cumplir los requisitos fitosanitarios requeridos por el país importador, finalmente el primer contenedor zarpó desde el puerto de Santa Marta con rumbo a Miami. La exportadora Clasifruit está trabajando con otros pequeños y medianos productores y asociaciones de productores, con los cuales espera acopiar y procesar el producto para despachar semanalmente un contenedor (diario El Tiempo).
Este nuevo éxito en las exportaciones agropecuarias de Colombia es otro ejemplo de cómo el sector privado, con el apoyo de las entidades del estado (ICA, MINCYT y Procolombia), puede acceder al mercado internacional, obteniendo mejores precios y estabilidad para sus actividades económicas. El beneficio para los pequeños y medianos productores, ojalá organizados en asociaciones, es indudable, ya que contarán con un comprador permanente y precios estables que les permitan continuar y expandir su agronegocio.
Según el MINCYT, con el pimentón se completa la lista de 108 productos agrícolas en fresco que cuentan con acceso al mercado de los Estados Unidos. Además de los mencionados están, entre otros, algunas hierbas aromáticas, los cítricos (mandarina, naranja y lima Tahití), la piña, la papaya y el mango. Colombia cuenta con cultivos de pimentón en zonas de postconflicto como el norte del Valle del Cauca, Antioquia y la región Caribe. Esta es otra razón por la cual el gobierno le está apostando al agro colombiano como parte fundamental de su estrategia para alcanzar la justicia social. Sin un campo productivo, seguro y rentable es imposible lograr la paz total, para la cual el presidente Petro espera construir las bases durante su mandato.
El desarrollo económico del país depende en buena parte de la consolidación del campo. Según el Dane, durante 2020 el agro representó una participación del 4,2% en el PIB nacional y generó el 16,3% del empleo nacional.
Y es que, invertir en el sector agrícola tiene un efecto multiplicador en la economía: cada peso invertido genera $2.18 en la cadena productiva y cada empleo agrícola significa 1.85 empleos. Sin embargo, la consolidación de este sector es uno de los retos que tenemos por alcanzar los colombianos.
Buen comentario, la oportunidad esta en activar muchos proyectos del estado que NO cumplieron su objetivo para ser productivos y son activos que con pequeña inversión pueden llegar a ser una oportunidad para Colombia. Conozco dos casos específicos del que podemos conversar estrategias para lograr cometidos …