Por: Oscar Patiño
Ingeniero Agroindustrial 
Responsable Técnico de Investigación 
Campofert S.A.S.

Carlos Sánchez Virviescas
Ingeniero Agrónomo, MSc
Líder Flores
Campofert S.A.S.

Desde hace aproximadamente 70 años la industria de fertilizantes desarrolló la tecnología de quelatos como una herramienta que, al agregarse a las soluciones nutritivas y suelos, aumenta la solubilidad de los cationes metálicos y garantiza su disponibilidad para la planta (MacNaeidhe y Flemming, 1988).

El costo de las deficiencias de micronutrientes para la humanidad es enorme y los costos no se limitan a la pérdida de producción agrícola. También puede tener un efecto deletéreo considerable sobre la nutrición y la salud humana. La Organización Mundial de la Salud clasificó la deficiencia de zinc como la quinta causa principal de enfermedad en los países en desarrollo (Edejer et al. 2002). La causa principal de los trastornos de los micronutrientes en los seres humanos es la baja ingesta dietética de alimentos ricos en micronutrientes (Buyckx, 1993), por lo tanto, superar las deficiencias en la agricultura contribuiría en gran medida a resolver estos trastornos en los seres humanos (FAO, 1993).

En cuanto a tecnología de quelatación se ha publicado a profundidad en los últimos años; en estos documentos el departamento de Investigación y Desarrollo de Campofert se apoyó para el Lanzamiento de su nueva línea Microkel Premium. A continuación, se presentan los 5 factores clave que buscan potencializar la efectividad de estos quelatos en la nutrición vegetal. Estos factores son comunes en todos los campos y en todos los cultivos donde se requiere ser precisos para garantizar los requerimientos nutricionales del cultivo de forma rápida y exacta, teniendo en cuenta interacciones con los coloides del suelo, con las mismas impurezas existentes en nuestras aguas de fertirriego o los pH donde se desarrolla el cultivo.

1. Concentración: además de ser un factor clave en la garantía del producto se buscó que la línea Microkel Premium presentara una mayor concentración, ya que esto se traduce en ahorro para nuestros agricultores, optimizando costos logísticos, de empaque, entre otros. Además, se requiere menos producto en el tanque de mezcla, lo que facilita la operación de fertilización.

2. Porcentaje de quelatación: En Colombia, el grado de quelatación esta estandarizado en la NTC 5691, donde se especifíca el grado de complejación o quelatación de un metal en un fertilizante. Esta norma está basada en los documentos de la Comisión Europea de Normalización (CEN), donde se definen las normas UNE-13366 (Método de la resina de intercambio catiónico) y UNE 15962 (Método de precipitación). En estos documentos se exige como mínimo 80% de quelatación, es decir que del 100% del elemento garantizado no debe haber más de un 20% de éste sin quelatar. De esta forma se garantiza que el catión presente en el producto, además de cumplir con la concentración, se encuentre quelatado, logrando así que no se presenten interacciones con los coloides del suelo o con los demás elementos existentes de la mezcla. Basándose en estos estándares de quelatación, Campofert formuló sus quelatos Premium buscando superar este límite de 80%, como se muestra en la gráfica 1.

3. Solubilidad: La solubilidad es un factor clave para garantizar que el producto se puede diluir en agua y esta libre de impurezas. A continuación, se presentan los resultados de Laboratorio de los Microkel Premium y Microkel Hierro EDDHA del laboratorio Agrilab:

4. Estabilidad de pH: El departamento de Investigación y Desarrollo de Campofert, entendiendo las condiciones que se presentan en nuestros cultivos, donde disponemos de aguas de riego o suelos con pH alcalino -o ácido en algunas áreas del territorio nacional-, formuló estos Microkel Premium logrando que fueran estables a un amplio rango de pH (desde 4 hasta 8) y el Microkel Hierro EDDHA en pH de 4 a 11 como se puede observar en las imágenes a continuación:

5. Sin presencia de azufre: Es claro que el azufre es un elemento secundario que la planta requiere en cantidades importantes dependiendo de la especie, y que dentro de sus funciones está la de ser componente de aminoácidos (cistina y metionina) y, por lo tanto, de proteínas, y coenzimas (Thompson 1967). El azufre es fundamental para la función de la nitrato reductasa en la conversión de nitrato en amonio, antes de su incorporación a los aminoácidos y para la formación de clorofila (Moore 2014), pero en varias formulaciones este elemento queda sobredosificado porque una gran cantidad de fuentes son sulfatos y esto no permite aportar adecuadamente este elemento. Por ello, los Microkel Premium no poseen dentro de sus garantizados azufre, permitiéndole a los agricultores ser más precisos en sus formulaciones y no aplicar elementos en caso de no requerirlos.