Por: Viviana Katherine Contreras Albadán
Bioingeniera
Coordinadora del área de Entomología del Laboratorio LEMAA
Centro de Bio-Sistemas (UTadeo)
I.A Luis Alejandro Arias Rodríguez
Director del Centro de Bio-Sistemas

Cada día es más evidente que el uso de bioinsumos se está convirtiendo en la alternativa ideal para mejorar el rendimiento agrícola y el control fitosanitario de los cultivos, ya que se trata de una herramienta que contribuye a una producción inocua y de calidad para garantizar la seguridad alimentaria del país.
Día a día más agricultores le están apostando a la inclusión de insumos agrícolas amigables con el ambiente, como el uso del control botánico con extractos vegetales o el control biológico con productos a base de microorganismos o macroorganismos, que dan un respiro a los cultivos brindando eficacia en la labor agrícola sin ocasionar efectos negativos en la salud humana y/o en la naturaleza.
Motivados por esta situación, más empresas productoras de insumos agrícolas aumentan sus esfuerzos por brindar variedad de productos biológicos mediante la introducción de especies foráneas que permitan suplir la necesidad del agricultor para mejorar la salud del suelo, garantizar la debida nutrición de las plantas y mantener la sanidad vegetal para aumentar la productividad de sus cultivos.
Así pues, se presenta la oportunidad de importar estos insumos mediante la obtención de una licencia ambiental, que inicialmente autoriza el ingreso de muestras experimentales o del producto formulado al territorio nacional para llevar a cabo una fase de investigación, en donde se realizan bioensayos que determinan las posibles afectaciones o modificaciones a los ecosistemas nativos por la introducción de estas especies. Lo anterior es posible desarrollarlo mediante un estudio de impacto ambiental (EIA) que incluye inicialmente un análisis de riesgos de las especies objeto de licenciamiento y para las cuales se evalúan de manera individual los efectos ambientales que puedan presentar. Con base en los resultados, se plantean bioensayos de forma experimental para documentar las afectaciones significativas de cada especie y conocer su alcance y con ello proveer la información necesaria para que la autoridad ambiental determine la aprobación o no de la introducción del bioinsumo a base de dicha(s) especie(s) foránea(s). Finalmente, es posible realizar una modificación a la licencia de la fase de investigación para iniciar una fase comercial, en donde el interesado podrá importar y comercializar el bioinsumo en cuestión. Es importante que se tenga en cuenta que dicha licencia se debe tramitar antes de la introducción de especies foráneas al país.
En este sentido y con base en su experiencia, el Centro de Bio-Sistemas de la Universidad Jorge Tadeo Lozano ha trabajado para ofrecer servicios que apoyen el trámite de obtención de licencias ambientales para las empresas interesadas, mediante el desarrollo de EIAs, análisis de riesgos y planteamiento y ejecución de los bioensayos que sean requeridos. Lo anterior es una apuesta del centro de investigaciones de la UTadeo que cuenta con la infraestructura adecuada, grupos de investigación, permisos ambientales, y los profesionales capacitados que se requieren en dicho ejercicio.
De este modo, se han adelantado acercamientos continuos con la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales – ANLA que, según el Decreto 1076 de 2015, es la autoridad encargada para otorgar, negar o suspender las licencias ambientales de un proyecto, obra o actividad (POA) que presente un impacto ambiental significativo o deterioro del medio ambiente.
Imagen 2. Áreas de Laboratorio del Centro de Bio-Sistemas: espacios para ensayos de evaluación que cumplen con la normativa técnica de gestión de calidad ISO/IEC 17025:2017.
Dichos acercamientos permiten establecer una comunicación desde el sector académico con la autoridad regulatoria, con retroalimentaciones permanentes para distinguir las posibilidades de ejecución de ensayos que permitan evaluar los posibles riesgos ambientales que conlleva el uso de bioinsumos a base de microorganismos o macroorganismos foráneos, garantizando la contención de la especie no nativa para evitar afectaciones significativas en los recursos naturales y/o el medio ambiente. También, se han realizado acercamientos en esta vía con asociaciones, empresas y organizaciones interesadas tales como Asobiocol, ANDI y Ceniflores, entre otros.
Los espacios de investigación y el desarrollo del C-Bios, tales como invernaderos de tecnología avanzada para el monitoreo y control de condiciones ambientales y de riego, así como laboratorios que implementan sistemas de gestión de calidad bajo la norma ISO/IEC 17025:2017 son diferenciales tangibles para garantizar la capacidad técnica, imparcialidad y fiabilidad de los resultados emitidos.
Imagen 3. Hortisimulador: Invernadero de alta tecnología para la ejecución de proyectos especializados mediante el monitoreo y control de condiciones ambientales.
Como centro de investigaciones estamos convencidos que la adición de este servicio fortalecerá los vínculos del sector productivo agrícola con el sector comercial mediante el conocimiento, experiencia e investigación de la academia, para cumplir con el propósito de un agro colombiano inocuo, más consciente con el ambiente y próspero para la sociedad.
Nota: Tenga en cuenta que, de acuerdo con la Circular externa No. 1 de 2024 expedida por el Instituto Colombiano Agropecuario – ICA, no se requiere licencia ambiental para bioinsumos como extractos vegetales y sustancias bioquímicas importadas. En caso de que requiera realizar el control de calidad de estos bioinsumos, los laboratorios del Centro de Bio-Sistemas cuentan con el registro ICA No. LB0000072023 para atender esta necesidad.